Actividad fin de semana 32: EL MEDIDOR

Mayo 2013

La actividad de hoy surge de una doble necesidad: la de medir a nuestros pequeños, e ir dejando constancia de sus estirones.
Queríamos un medidor que nos sirviera como regla de medir, pero a la vez nos permitiera anotar las medidas y los años que corresponden a ellas.
Así de esta manera es como surge la idea de este "árbol-tronco-medidor".

Con un listón de madera de 160 cm (pensado para comenzar en 50 cm y llegar a los 200 cm), un rotulador permanente y una plancha de goma eva, hemos realizado este medidor, en nuestro caso preparado y pensado para dos niños.

Así es como lo hemos hecho:
1.- Adquirimos un listón de madera de pino o similar de 160 cm de alto por 20 de ancho. Pensando que vamos a utilizar un rotulador permanente, hemos aplicado una capa de barniz incoloro al agua, para evitar que la tinta se corra por las vetas, pero si no barnizáis el resultado es también interesante.
2.- Preparamos una plantilla a modo de boceto, con las medidas y la longitud de las rayas que vamos a dibujar para ver si nos gusta y no llevarnos sorpresas de última hora.
3.- Vamos marcando con lápiz en la madera cm. a cm. a lo alto, y la longitud que vamos a darle a nuestras líneas. Luego con ayuda de la regla y el rotulador permanente, dibujamos una a una.
4.- Cuando tengamos todas las líneas marcadas, pasamos a los números. Nosotros hemos bocetado en papel los números que nos gustaban, y luego los hemos marcado sobre la madera dibujando sobre ellos con el lápiz bien presionado. La marca resultante nos ha servido de guía para a continuación dibujarlos con el rotulador.
5.- Con el medidor listo comenzamos con las hojitas. Hacemos un boceto en papel, para luego pasar a la goma eva e ir recortando tantas hojas como años vayamos a poner. A esas hojas le añadimos los números correspondientes a cada año (podemos dibujarlos también con rotulador o pegar pequeños número de goma eva)
6.- Y ya tenemos todo listo. Con una chincheta vamos colocando cada hoja en su medida correspondiente, y guardamos las que nos sobran para los siguientes años.
Aquí os dejamos las imágenes del proceso.

Necesitamos para hacer nuestro medidor:
un listón de madera, una regla, lápiz, rotulador permanente, tijeras y goma eva.

Comenzamos marcando en el listón las medidas, con la ayuda de una plantilla
y con la regla la longitud que llevarán las líneas que vamos a dibujar.

Con la regla y el rotulador permanente vamos dibujando una a una todas las líneas.
A continuación con una plantilla y el lápiz marcamos los números para que nos sea más fácil
perfilarlos y que salgan perfectos y todos iguales.

Repasamos con el rotulador la marca que ha quedado en la madera y luego rellenamos.

Cm a cm así avanza el medidor.

En una plancha de goma eva y con una plantilla de papel hacemos las hojitas que marcarán
la edad de los niños en cada altura.

Recortamos tantas hojas como necesitemos y le vamos poniendo los números (uno por año cumplido).
Los números podemos dibujarlos directamente en la goma eva,
o pegarle unos números realizados con el mismo material.

Vamos colocando cada hoja donde corresponde clavada con una chincheta.

Nuestro medidor con las hojas colocadas, a la derecha las de un peque y a la izquierda las de otro.

Probando que el medidor funciona correctamente.

Con un simple bolígrafo de punta fina podemos hacer anotaciones en nuestro medidor.

Y el medidor en la habitación colocado para usar todas las veces que quieran.

Con el medidor listo, lo hemos colgado a la altura correspondiente en la pared, y hemos anotado las medidas de cada edad. A la izquierda las hojitas de crecimiento de un niño y a la derecha las del otro. Para distinguirlos hemos puesto los números que llevan las hojas de distinto color.

A partir de ahora cada pequeño estirón que hagan, anotarán la fecha, y cuando cumplan años añadirán una hojita nueva. A medida que ellos se vayan haciendo grandes su medidor se llenará de más y más hojas, pero cuando los estirones entre año y año cada vez sean más pequeños, provocaran que las hojas más altas estén más juntas, como si fuera un árbol que va creciendo con ellos.