Jugando con ellos, en alguna ocasión les hemos oído decir: "tienes cara de patata vieja!!!!" y tratando de averiguar el por qué de esta frase, nos hemos dado cuenta de como se fijan en nuestras expresiones, el valor que les dan y como las relacionan con lo que nos sucede.
Hay momentos y situaciones en los que la cara se nos arruga tanto, tanto, que se parece realmente a una patata vieja. Ellos se dan cuenta enseguida, y como no, nos lo sueltan y se ríen. Afortunadamente para nosotros, el efecto "patata vieja" es momentáneo, y, cuando algo bueno sucede, la cara vuelve a su estado natural, sin arrugas "extra".
Con este espíritu lúdico y divertido, hemos ideado una actividad donde poder darle una vuelta de tuerca a esto de la "patata vieja" y sus arrugas, convirtiéndolo en una búsqueda en la que hemos ido al encuentro de las verdaderas "cara patatas".
Para ello hemos cogido las viejas patatas que han quedado de la cosecha anterior y ojos de diferentes tamaños. Hemos mirado las patatas con detenimiento y en todas hemos encontrado simpáticas expresiones a las que añadirles para darles vida unos bonitos ojos saltones. ¡Como resultado! ... unas fantásticas "cara patata" y muchos momentos de risas garantizados.
Animaros a encontrar vuestra cara en una patata.
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| Escogiendo los ojos que mejor le van a nuestra patata. |
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| Probando que tal quedan los ojos escogidos a nuestra patata. |
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| Probando distintas posiciones. |
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| Y aquí están algunos de los resultados obtenidos. ¡Auténticas cara patatas! |
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| ¿Encuentras la tuya entre ellas? |
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