Estas maravillosas judías y sus minúsculas flores es una de las hortalizas que reinan en la huerta durante estos meses de verano.
Las judías verdes pertenecen a la familia de las leguminosas, plantas herbáceas y leñosas que pueden ser de tres tipos: precoces, de ciclo medio y tardías.
Existen numerosas variedades de judías verdes: planas, redondeadas, ligeramente curvadas, sin hebras, alargadas, violetas, tubulares...
Su siembra como casi todas las legumbres es sencilla y se realiza directa en tierra. Ponemos 2-3 semillas en cada golpe que cubrimos con una ligera capa de tierra de unos 2 cm, siempre después de que hayan pasado las heladas.
Si la especie de judías es trepadora debemos preparar para ellas unas redes o varas, mientras que las de mata baja no necesitan nada de apoyo en su crecimiento.
Cuando la siembra va adelante, pasados dos meses comienzan a aparecer las primeras flores blancas que muy pronto dan paso a las tiernas vainas.
Estas no se deben recolectar todas a la misma vez, sino espaciando los días, para que al recogerlas con regularidad, sigan produciendo durante más tiempo.
Hoy desde A horta de Artes os traemos la judías de mata baja y redondas, que este año hemos sembrado a continuación de las habas y el maíz, y muy cerquita de los pimientos. Les costó arrancar durante las primeras semanas, por el mal tiempo y el exceso de lluvia, pero al final todas salieron adelante. No han alcanzado un tamaño y altura como otros años, siendo las plantas más pequeñas, pero a la cantidad y calidad de la judías no le ponemos ninguna pega. ¡Están buenísimas!.
Las judías verdes pertenecen a la familia de las leguminosas, plantas herbáceas y leñosas que pueden ser de tres tipos: precoces, de ciclo medio y tardías.
Existen numerosas variedades de judías verdes: planas, redondeadas, ligeramente curvadas, sin hebras, alargadas, violetas, tubulares...
Su siembra como casi todas las legumbres es sencilla y se realiza directa en tierra. Ponemos 2-3 semillas en cada golpe que cubrimos con una ligera capa de tierra de unos 2 cm, siempre después de que hayan pasado las heladas.
Si la especie de judías es trepadora debemos preparar para ellas unas redes o varas, mientras que las de mata baja no necesitan nada de apoyo en su crecimiento.
Cuando la siembra va adelante, pasados dos meses comienzan a aparecer las primeras flores blancas que muy pronto dan paso a las tiernas vainas.
Estas no se deben recolectar todas a la misma vez, sino espaciando los días, para que al recogerlas con regularidad, sigan produciendo durante más tiempo.
Hoy desde A horta de Artes os traemos la judías de mata baja y redondas, que este año hemos sembrado a continuación de las habas y el maíz, y muy cerquita de los pimientos. Les costó arrancar durante las primeras semanas, por el mal tiempo y el exceso de lluvia, pero al final todas salieron adelante. No han alcanzado un tamaño y altura como otros años, siendo las plantas más pequeñas, pero a la cantidad y calidad de la judías no le ponemos ninguna pega. ¡Están buenísimas!.
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| En mayo, a las pocas semanas de sembradas ya comienzan a aparecer nuestras pequeñas plantas de judías. |
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| Pasado un mes las judías resisten como pueden el mal tiempo. |
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| Y en junio, por fin comienzan a despegar. |
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| A los dos meses de la siembra comienzan a aparecer las primeras delicadas flores. |
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| Y semanas más tarde las primeras vainas. |
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| Todavía tiernas comenzamos a recoger las primeras, que siempre de todas, son las más ricas. |
A este tipo de judías aquí las conocemos como francesas, y podemos comerlas enteras o partidas en dos. Quitamos ambos extremos y listas para elaborar nuestros platos favoritos.
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