Esta actividad está basada en el cuento popular catalán "Garbancito", en el que el protagonista era tan pequeño que debía cantar por la calle para que nadie lo pisara y todos supieran que estaba allí.
¡Pachín, pachín, pachín!
¡Mucho cuidado con lo que hacéis!
¡Pachín, pachín, pachín!
¡A Garbancito no piséis!. Para realizar esta actividad tan solo necesitamos un puñado de garbanzos y unos rotuladores. Los niños deberán pintar en cada uno de ellos, una cara para darle vida y convertirlo en un pequeño "Garbancito". Cuando estén los garbanzos caracterizados, los niños deberán buscar lugares idóneos donde colocarlos, y si fuera necesario dibujar el resto del cuerpo para terminar de darles vida.
Cuando todos nuestros pequeños Garbancitos estén repartidos por "el mundo"... comienza el juego.
Por equipos o de uno en uno, formularemos la pregunta...
Garbancito... ¿dónde estás?
y con mucha, muchísima atención saldremos a buscar y a encontrar a todos los pequeños Garbancitos.  |
| Repartimos a cada niño un puñado de garbanzos. |
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| Con ayuda de un rotulador caracterizamos cada uno de ellos con los rasgos que más nos gusten, y con ello desarrollamos nuestra precisión en el dibujo y la motricidad fina. |
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| Y salimos a colocar nuetros pequeños "Garbancitos" en los lugares escogidos. |
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| Cuando lo necesitemos podemos dibujar el resto del cuerpo para darles vida. |
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| Listos para ser encontrados... incluso en los lugares más insospechados. |
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